MUJERES REALES

Me imagino a Ava Gardner con la radio puesta en su habitación. De fondo Frank Sinatra embelesando mujeres con sus ojos azules hechos canción, y ella guardando el secreto de que pronto sería su marido. Incluso puedo imaginarla aún más joven, antes de que ella misma supiera que iba a ser actriz y mientras él ya había sido número uno en las listas de ventas. La veo sentada frente a un espejo, dispuesta a salir a bailar, dándose los últimos retoques de una toilette acorde a la época. Seguro que se gustaba, se veía preciosa y no se escondía ni tenía complejos. Conocedora de la belleza que Hollywood más tarde le reconoció, saldría pisando fuerte por las calles de Wilson (Carolina del Norte).

Ava Gardner era una mujer real, bella y sin más accesorios que una buena iluminación y una encantadora y sensual fiereza, que hizo perder los nervios al bueno de Frankie más de una vez, se convirtió el animal más bello del mundo. Por aquel entonces, durante aquellos Golden Years de Hollywood, los paparazzis comenzaron a realizar su trabajo y las fotografías de las actrices se agolpaban en las revistas para consumo de señoras escandalizadas y jovencitas soñadoras.

Eran fotos cuidadas en ocasiones, de entrevistas en profundidad, pero también había muchas fotos de estrenos, de cenas, de saraos en boîtes…instantáneas en las que a penas posaban, -lo que hoy sería un photocall (fotocol…pues no tengo muy claro cual es la palabra adecuada)-, saliendo de un coche, firmando autógrafos, hay fotos de Marilyn comprando corbatas… Pero entonces no había Photoshop. 

Ayer estaba viendo la televisión y salía una mujer perfecta. Supongo que la genética hacía mucho y el tratamiento de la imagen el resto. Un anuncio puede ser asemejado a una película, así que puedo compararla con cualquiera de las de Ava o de mi rubia favorita. Y mientras veía a esa perfecta mujer sin un lunar, sin una estría, un poco de celulitis, una rojez…nada, perfecta, altísima, una talla 36 como mucho, desnuda. La comparé con las piernas torneadas pero reales, contundentes, de Marilyn luchando con la rejilla del metro de «Con faldas y a lo loco». Un hito de la sensualidad.

Me pregunté entonces cómo de imbéciles tenemos que ser para creernos que esa mujer del anuncio existe en esas condiciones de utópica perfección y, lo que es peor, para aceptar que está así después de usar dos semanas determinada crema reductora. Yo me planto. Me niego a creerlo, no dejaré que  me afecte. La belleza de verdad tiene defectos.

 

 

 

2 comentarios en “MUJERES REALES

  1. Muy buen post y además muy de acuerdo con lo que dices: ya sabes que a los hombres nos gustan las mujeres como Ava o Marilyn antes q esas escobas con traje haute-coutture 🙂

Deja un comentario si te apetece por fi

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s